Costa del Este, la “playa del millón de pinos” y de fina arena

En esta ciudad verde no existen medianeras ni portones. Las calles son de arena y llevan nombres de flores y arbustos. Es que no existen las medianeras, en su lugar los llamados “cercos verdes” -delimitaciones compuestas solo por plantas- se encargan de separar las casas entre sí.

Todo acerca de Costa del Este está embebido en la naturaleza. Desde el ingreso a la localidad a través de la Avenida 4, paralela a calles como Los Lirios, Las Gardenias, Los Cedros y Los Nogales, hasta las reglas estrictas que permiten conservarla como una aldea verde en pleno partido de La Costa.

La gran mayoría de las calles de la ciudad -salvo las “arterias”- no están asfaltadas, tampoco las veredas. “Esto es a propósito, para cuidar a la localidad de futuras inundaciones. El médano tiene una característica muy particular que es que funciona como una esponja. Cuando llueve absorbe el agua y la almacena para que nosotros después la utilicemos”, explica María Sol Rosarno, una de las guías locales.

Además de sus playas, angostas y de arena fina, uno de los atractivos principales de Costa del Este es la arquitectura particular de sus grandes cabañas; muchas de ellas de estilo alpino y rodeadas de álamos, acacias, aromos, eucaliptos, laureles y pinos.

Su historia

Como localidad joven, la historia de Costa del Este se remonta al año 1966 y a la visión de Emilio Doura, un emprendedor que encontró en la zona de médanos la posibilidad de construir un club de campo tomando inspiración de sus viajes por el mundo.

“A Costa del Este había que entrar por la playa con la tabla de mareas, con camiones 4×4 ‘guerreros’ que había en esa época. Cuando nosotros veníamos acá era toda una aventura, y a veces no estaba buena porque te morías de frío. Era realmente una odisea”, explica Daniel Doura, hijo del fundador.

El objetivo de Emilio no era crear un barrio privado, pero sí un balneario de excelencia en La Costa. “Lo que hemos hablado siempre con mi padre es que siempre quisimos que este lugar fuese un centro de Artes y Ciencias”, agrega.

Su inspiración provino de viajes y vacaciones en Punta del Este, Bariloche, Brasil y particularmente, España; en donde observó la construcción de destinos turísticos con “distancia de fin de semana” de las grandes ciudades.

Por ejemplo, la ciudad de Valencia, se encuentra a cerca de 350 kilómetros de Madrid: prácticamente la misma distancia entre Costa del Este con la Ciudad de Buenos Aires.

“Costa del Este es una ciudad del boca a boca, es una ciudad que se recomienda y donde lo más importante es la seguridad familiar. Lo más importante que hemos logrado acá es conocer a tu vecino. Nos cuidamos entre todos”, asegura Doura.

“Tengo buenos recuerdos de todo porque me parece que la intención de mi padre fue nivelar para arriba en este país, siempre. Coste del Este funcionó para darle ideas a otra gente de que esto es posible. Eso nos pone muy contentos, por lo pronto por mi padre porque creo que su sueño se cumplió”, concluye el compositor.

Recorriendo COSTA DEL ESTE I LA COSTA BUENOS AIRES I ARGENTINA I 4K TOUR Walking

Costa del Este es una localidad argentina ubicada en la provincia de Buenos Aires, perteneciente al partido de La Costa. Es una villa turística y balnearia, ubicada a orillas del océano Atlántico. Limita con Mar del Tuyú al norte y Aguas Verdes al sur. El balneario fue fundado en 1966, cuando todavía era un lugar desértico. Son considerados fundadores los señores Fidel A. Zabalo, Emilio Doura y Marcelino Grizutti, quienes compraron las tierras a la familia Duhau. La fijación de médanos y caminos se hicieron sin cambiar el relieve ondulado y suave. Para ellos se plantaron diversas especies arbóreas, como tamariscos y acacias, formando una duna densamente forestada. Más tarde se agregaron eucaliptos, varias especies de pinos, álamos y sauces. Desde entonces se la conoció como La playa del millón de pinos. Gracias al trabajo forestal que se llevó a cabo, el pueblo está densamente forestado, teniéndose prohibido talarlos. Las calles son, en su mayoría, de tierra, aunque las céntricas están asfaltadas. No por casualidad, las mismas llevan nombres de especies de árboles o plantas. Cabe señalar que el encargado de dirigir la forestación inicialmente fue el técnico forestal Arnaldo Félix Esquivel y por indicación del señor Doura, esbozo el proyecto en el balneario uruguayo Punta del Este, así también estuvo a cargo del vivero de San Clemente del Tuyú, dado que allí los Pinos se desarrollaban más rápido y fue quien coloco el nombre a las calles. Originalmente se trató de un barrio cerrado que al no contar con el número crítico necesario de propietarios capaces de sostener con su aporte la infraestructura básica, en asamblea de vecinos optaron por municipalizar el desarrollo urbanístico pasando a ser un barrio abierto manteniendo ciertas características y reglamentaciones que garantizan una arquitectura agreste y distintiva
, , , ,

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *